El delantero de Leitza ejerce de guía de Larunbe en el Parejas y apunta a “luchar” y a “salir con humildad” ante Irribarria-Rezusta el domingo
Noticias de Gipuzkoa. Oinatz Bengoetxea tiene ya muchos tiros en el ala. Junto con Aimar Olaizola es el pelotari más longevo de la liguilla de semifinales del Parejas y sabe de qué madera está hecho el campeonato. El de Leitza está curtido, conoce las aristas de cada compromiso, de cada lugar común. Por eso ejecuta una labor de diván con Mikel Larunbe, su compañero en el tajo, que afronta su primera cita de Primera lleno de ilusión, pero sin experiencia previa, con la mochila aún vacía. El vizcaino se ha encontrado con una competición muy diferente a la de Segunda, más larga, maratoniana, en la que los vaivenes son más duros y los focos brillan perpetuos. “Nuestro objetivo principal es disfrutar”, desgrana el manista de Leitza. Marca el camino a su compañero. El faro, tal y como siempre dice Larunbe, es la veteranía del pizpireto puntillero navarro. “No pensamos en la final”, apostilla Oinatz, quien agrega que “el domingo tenemos una buena oportunidad de avanzar, pero estará complicado ganar a Irribarria-Rezusta en el Atano III