Ezkurdia se marchó exhausto, sin un gramo más de fuerza que dar, pero consciente de que sigue haciendo historia
Joseba Ezkurdia tuvo que salir de la sala de prensa del Bizkaia de Bilbao a la pata coja y haciendo paradas para estirar el gemelo. No tenía un gramo más de fuerza que dar. Pero se marchó con una sonrisa de oreja a oreja que seguro que no se le borró durante toda la noche. «En la cancha no somos conscientes del partido que hemos jugado. Ha sido redondo, tanto a nivel mental, como a nivel físico por todo lo que nos ha exigido, pero también en cuanto a juego creo que ha sido un gran espectáculo de pelota». No se puede describir mejor, Joseba.