El leitzarra e Imaz neutralizaron a Altuna y sobreviven al partido del ser o no ser
Diario de Navarra. Las mil personas que abarrotaron este sábado el Labrit no vieron la Cabalgata de Reyes, pero aplaudieron a rabiar y gozaron de un rey y mago en la cancha: Oinatz Bengoetxea hizo diabluras en el recinto pamplonés en un partido que suponía, de facto, un ser o no ser. Sobrevivieron y con solvencia Bengoetxea VI-Imaz, que cosecharon un punto que les permite afrontar la segunda vuelta con algo de oxígeno.