Anjeli Lizarribar, Eba Aramendi y los hermanos Zabala, Iñaki y Xalton volverán a apoyar al amezketarra en una nueva final
La afición de Jokin Altuna no está compuesta solo de jóvenes. Cada vez que el amezketarra afronta un partido de competición oficial dos matrimonios se sientan en las butacas de cancha ya sea del Beotibar de Tolosa, del Astelena de Eibar, del Atano III de Donostia, del Ogueta de Vitoria, del Bizkaia de Bilbao o el frontón que sea. Son Eba Aramendi, Anjeli Lizarribar y los hermanos Iñaki y Xalton Zabala. «No somos los únicos», coinciden. «Hay un grupo nutrido de unos 40 pelotazales del que también forman parte, entre otros, Itziar y su hijo Julen, forofos ambos».