El amezketarra domesticó el brío inicial de un Laso que se adelantó 1-5 y jugará su cuarta final seguida
Gara. Aunque sea una modalidad relativamente nueva, solo otros tres manistas, Patxi Eugi, Juan Martínez de Irujo y el mejor especialista, Aimar Olaizola, habían conseguido antes jugar cuatro finales consecutivas del acotado, hito que Jokin Altuna alcanzó ayer con la naturalidad del que revuelve con la cucharilla su primer café de la mañana. El amezketarra se deshizo con autoridad de un Laso que puede estar orgulloso con el campeonato realizado y se repetirá la final del año pasado ante Ezkurdia, pero el Altuna de hoy poco o nada tiene que ver con aquel.