El zaguero de Berriozar ofrece una exhibición de pegada, colocación y seguridad para alcanzar junto a Ezkurdia el liderato en solitario del Masters
El pelotazale de Azkoitia es tan exigente como su frontón, el Gurea. Uno y otro son agradecidos. Lo comprobó de primera mano Jon Mariezkurrena, y crack en el cierre de la tercera jornada del Masters CaixaBank. El poder de su brazo derecho resplandeció como la estrella Sirius, la más brillante de todas, y varios espectadores puestos en pie le aplaudieron en el recorrido desde el centro de la cancha hacia el vestuario, situado en el rebote. No podía ser menos. Acababa de firmar una de las mejores actuaciones individuales, si no la mejor, en lo que va de verano.