El amezketarra, eléctrico en Eibar, guía a un gran Martija a la cumbre del Parejas ante Artola-Imaz en un Astelena de Eibar a reventar
Agresivo. Violento. Genial. Chistera en la cabeza, un volcán en la zurda. Jokin Altuna tiene una marcha más. Terrible. Chico de fuego. Su mano está afilada. Bisturí. Más todavía en el frontón Astelena de Eibar, una cancha con el suelo más rápido del circuito industrial. La izquierda del amezketarra es un Kalashnikov. Apunta. Dispara. Diana. ¡Boom! El delantero guipuzcoano y Julen Martija sellaron este domingo el pase a la final del Campeonato de Parejas con un ejercicio de autoridad sobre Iñaki Artola y Ander Imaz, inermes en el vendaval. A los de Baiko Pilota no se les puede achacar nada, porque no hicieron un mal partido, mas sus rivales les pasaron por encima.
