El actual campeón del Manomanista cree que no está al nivel del año pasado. Atiende a Mundo Deportivo en vísperas de defender txapela contra Oinatz Bengoetxea
Mundo Deportivo. Hace un año era una sorpresa. Hoy es la máxima estrella de la pelota a mano. Iker Irribarria ha vivido un año vertiginoso en el que apenas ha tenido tiempo para pararse a pensar en todo lo que le ha sucedido. Aquella txapela del Manomanista de 2016 le cambió la vida y 12 meses después vuelve a la casilla de salida en busca de un nuevo título que añadir a un palmarés que no para de crecer.