El Correo. Desde que cayeron en la final del Parejas, Irribarria y Zabaleta han unido sus fuerzas en tres ocasiones y en todas han salido victoriosos. La última fue ayer en el renovado frontón Uranzu de Irún, que registró el lleno. Y es que la pegada del delantero de Arama y el zaguero de Etxarren infunde mucho respeto y es capaz de desequilibrar cualquier encuentro.
Irribarria y Zabaleta infunden respeto en el renovado frontón de Irún
