El frontón Larrunarru de Amezketa vivió el regreso de los aficionados siete meses después
Noticias de Gipuzkoa. Los aplausos del público volvieron ayer a los frontones. Atrás quedaron esos siete meses marcados por el silencio y esos partidos desangelados en los que el sonido de los pelotaris retumbaron en los recintos vacíos. Los tantos volvieron a ser celebrados desde las gradas y esa sintonía entre el pelotari y el aficionado volvió a vivirse. Era una sensación para nada olvidada y que se echaba mucho de menos tanto para los protagonistas que se desempeñaban en la cancha como para las personas que estaban fuera.