El de Goizueta entiende que Víctor y Ezkurdia, sus próximos rivales, son «los peores para mi juego»
Gara. La velocidad ha sido el secreto del resurgir del Cuatro y Medio, una modalidad recuperada por iniciativa de ETB en 1989 después de tres décadas de olvido. Y en estas tres exitosas décadas, un nombre destaca entre todos los pelotaris que la han disputado; el de Aimar Olaizola, poseedor de siete txapelas de la distancia. Sin embargo, son ya tres las ediciones consecutivas en las que el de Goizueta no ha logrado colarse a la final y casi cinco desde que lograra su último título, el de 2013, ante Martínez de Irujo en el Bizkaia de Bilbo.